Las apuestas del futuro

El mundo de las apuestas deportivas está al alza y su crecimiento parece no tener fin. Constantemente escuchamos mediante todos los medios de comunicación anuncios relacionados con las casas de apuestas, cada vez más eventos están patrocinados por éstas y su fuerza se ha multiplicado por una cifra descomunal en apenas unos años, copando todos los espacios publicitarios importantes de los grandes eventos deportivos. Pero… ¿Hacia donde se dirige el mundo de las apuestas? ¿Realmente no tiene fin este crecimiento exponencial?

Para entender a dónde vamos, siempre es bueno saber de dónde venimos. En el caso de las apuestas deportivas en España podríamos citar como antecesor de las bookies un juego mítico de Apuestas del Estado como La Quiniela. Si bien poca importancia tiene este juego dada la poca similitud con lo que nos encontramos hoy en día, con la tecnología dominando el mundo y miles de opciones a nuestra disposición para apostar.

Previo a todo este “boom” con locales presenciales y cada vez más casas de apuestas online, nos encontramos con una situación hace apenas 10 años en la que se vivió un vacío legal, sin leyes que reflejaran lo que se debía hacer con los beneficios obtenidos en las casas de apuestas, y apenas regulación del juego. La actividad era menor en el sector, pero la creciente afición por las apuestas deportivas obligó a legislar todo lo relacionado con ellas, pasando por una fase en la que se debía declarar en función de los beneficios sin tener en cuenta las pérdidas. Los que vivían de las apuestas en aquel momento, emigraron. Afortunadamente a día de hoy las leyes al respecto tienen más lógica y se tiene en cuenta la cuenta final de beneficios/pérdidas a la hora de declarar impuestos.

Y es que la situación actual ya requiere de cierto conocimiento, tanto a nivel de leyes, como acabamos de comentar, como a nivel general del mundo de las apuestas. Existen muchas alternativas, muchas casas de apuestas en las que podemos registrarnos, por lo que es importante realizar una comparación de proveedores y encontrar la mejor casa, que según las necesidades de cada usuario puede llegar a ser una distinta, pues cada una tiene su oferta en cuanto a deportes y mercados disponibles.

Sea como sea, la situación actual de las apuestas deportivas, en contra de lo que se podría pensar, ha ido de lo online o lo presencial, proliferando sobremanera los locales presenciales para apostar. Al contrario de lo que sucede con la mayoría de negocios, en los que se ha pasado de un local físico a la venta online, el éxito del producto online permite a las bookies crear cada vez más locales presenciales, con gran éxito en la mayoría de los casos.

Pero la gran pregunta es qué camino seguirá en el futuro el mundo de las apuestas. Saber de antemano esto nos puede permitir aprovechar una oportunidad laboral y montar un negocio relacionado con este sector tan prolífico. Uno de los puntos en los que se concentrará la acción en el futuro a buen seguro es en las apuestas relacionadas con los E-sports. Este tipo de deportes relacionados con los videojuegos están cogiendo cada vez más fama, creciendo a pasos agigantados, y la mayoría de las casas de apuestas ha empezado a ofrecer cuotas relacionadas con las grandes competiciones de juegos como Counter-Strike o League of Legends. Quien sabe si en el futuro las cantidades movidas en este tipo de apuestas superarán las cifras que mueve el fútbol actualmente.

Lo que está claro es que el mundo de las apuestas cada vez crece más y más, y el número de usuarios de las casas de apuestas sigue aumentando. Son muchas las voces que decían que se trababa tan solo de una situación temporal, que pronto acabarían cayendo en el olvido, pero lo cierto es que de momento el mundo de las apuestas no va a menos, sino todo lo contrario, y no hay motivos para pensar que este crecimiento vaya a parar próximamente. ¿Riesgos en el sector? Una saturación del mercado, alguna ley contra el juego o que de repente la gente se de cuenta de que está perdiendo dinero con las apuestas (caso más habitual, pues más del 90% de la gente pierde dinero con las apuestas). Desde luego, ninguna de esas situaciones parece estar cerca.