Fulham y United se intercambian los papeles

Dani Navedo - Encuentro realmente difícil para el Manchester United en el campo del Fulham. A la buena racha de los Blancos en casa, había que unir las numerosas bajas que ya desde hace varios partidos vienen arrastrando los Red Devils, incluido Vidic, que se retiraba tocado el pasado fin de semana frente a los Wolves. Así pues, si ya Craven Cottage es un campo complicado, no contar con Vidic, Evans, Neville, O´Shea, Rio Ferdinand, Brown y Van der Sar, se antojaba un hándicap complicado de superar. 

Desde luego, el choque no iba a ser tan fácil como el comentado del pasado fin de semana frente al Wolverhampton. Entre otras cosas, porque Mick McCarthy alineó a un total de diez suplentes respecto al once que había ganado la anterior jornada. La defensa no lo pasó mal en ese partido porque se enfrentaba a un equipo B, pero esta si sería una prueba real para esa zaga tan mermada del Manchester United. Sir Alex Ferguson, finalmente, formaría con Kuszczak bajo palos, Fletcher en el lateral derecho, con Evra por la zurda, junto con De Laet y Carrick en el centro de la defensa.

Empezaba el partido y el Fulham estaba muy cómodo. Como comentaba Petón, el único equipo al que no le afecta no tener la posesión del esférico, es al Chelsea, el resto de mortales se resienten. El problema en este caso no tenía nada que ver con la zaga, sino con Anderson y Scholes, que no aportarían demasiado al ataque. Paul se vendría abajo después del primer tanto, pues después de perder un balón cerca de la frontal del área que acabaría en el gol de Murphy, se quedó cabizbajo y sin ganas de conseguir su tanto número 100. Quizás si Carrick y Fletcher no estuvieran en esa posición improvisada, podrían haber aportado más, pero son solo suposiciones.

En la banda derecha los Blancos habían encontrado un filón. Evra era hoy medio lateral y medio extremo, por lo que su espalda no estaba del todo cubierta. En la segunda parte se notaría mucho más esta situación, pero solo durante unos minutos, concrétamente, hasta que Ferguson movió el banquillo. Al salir de los vestuarios, una internada por este extremo acabaría en el 2-0, obra en esta ocasión de Zamora. Pero como comentaba, después de hacer sus dos primeros cambios el United, el panorama cambió. Saltaron al campo Fabio da Silva por De Laet, pasando Fletcher al centro de la zaga, formando así pareja con Michael Carrick; mientras que Berbatov entraría por Gibson, sin duda el mejor centrocampista de los visitantes en el partido de hoy.

Es curioso, pero la entrada de un hombre frío como Berbatov revolucionó al Manchester United. En cinco minutos los de Ferguson crearon más peligro que en todo el partido, pero tampoco fueron capaces de crear una ocasión clara de gol. Ahora el Fulham esperaba atrás bien organizado y sin complicarse la vida a la hora de sacar el balón jugado. Cuando mejor estaba el equipo de Old Trafford, un balón largo que baja a la perfección Zamora, lo aprovecha Duff para hacer el tercero y cerrar así toda una goleada ante los Red Devils. Un gran gol que dejó sin emoción el final del choque.

Derrota y a pensar ya en otra cosa. El United se topó con un Fulham espléndido en todos los aspectos. Hoy los que desplegaron un fútbol de campeón, fueron los de Roy Hodgson, consiguiendo una goleada más que merecida. Ferguson tendrá que pensar ahora en mimar a sus zagueros y estará deseando que se recuperen cuanto antes para poder volver a basar su juego en la solidez defensiva. Mañana, turno del Chelsea, esto no para…