Hola. Si eres aficionado de un equipo que acaba de descender de categoría, ánimo y suerte. Es duro, lo sé.
El 1 de junio ocurrió lo que muchos pensaban ya en febrero y antes, que el Deportivo iba a descender. Como ya hemos dicho en otro artículo, Fernando Vázquez ha ilusionado al deportivismo, es una realidad. La permanencia era el objetivo, pero estaba difícil, a pesar de que tuvo dos oportunidades para certificar la salvación matemáticamente. Él será el hombre que guiará al Dépor en esta nueva etapa, otra vez en Segunda División, con un proyecto de cantera (no queda otra: media plantilla se va y el equipo está en concurso de acreedores). Es el hombre más indicado para hacerlo.
Antes de la última jornada, sabía que era difícil salvarse. La Real es un equipo de Champions y tenían que ganar en Riazor. Ya me había hecho a la idea, en mi cabeza ya rondaba lo de que descender era dar un paso atrás para luego dar dos hacia adelante. Y sí, ésta vez sí, no como el anterior descenso, en el que se buscaba subir de nuevo cuanto antes. Veía la opción casi obligada de empezar desde cero con un equipo de la casa, con caras nuevas y gente joven. No sé cuánto puede durar volver a Primera, de hecho, no tiene que importar, sino que cuando se vuelva sea para quedarse, ése es el verdadero objetivo a seguir. De todas maneras, el descenso siempre es un golpe. Cuando acabó el partido me mostré entero, pero al mirar a mi alrededor y ver a niños llorar, y a continuación ver a Valerón llorar como ellos, como un niño, me pudo. Valerón lleva en el Dépor casi los mismos años que llevo yo yendo a Riazor. Es más, mis recuerdos futbolísticos ya son con el canario sobre un campo de fútbol. Ver cómo la leyenda con la que tanto he disfrutado se va así de la ciudad donde ha sido adorado (y aun así nunca se le podrá devolver todo lo que nos ha dado), de una manera tan injusta e inmerecida me duele, más todavía al ser una de esas personas que no entiende de maldad, que no se le recuerda una mala palabra ni dentro ni fuera del campo. Un ejemplo.
El día siguiente del descenso. Vuelves a casa, mezclando incredulidad, rabia y la vista ya puesta en el futuro, en cómo va a ser la temporada que viene, pero es el día después en el que piensas con detenimiento sobre todo ésto. Piensas en confeccionar la plantilla del año que viene, piensas en qué jugadores se van, quiénes se quedan y quiénes pueden llegar. Empiezas a jugar a ser secretario técnico y ojeador de la cantera (más que en ningún otro momento).
Dos días después del descenso. A los dos días es cuando ya empiezas a desear que vuelva a rodar el balón. Quieres que todo esté ya en marcha, que la plantilla esté cerrada y que a los veinticinco seleccionados les vaya de perlas, por su bien y el del equipo, porque tienes ganas de volver a donde estabas, y, aunque lo importante es volver con un proyecto firme, quieres que eso se dé lo antes posible. Es esta última sensación la que se va a quedar todo el verano. Temerás, dudarás, reflexionarás, pero ante todo seguirá presente la ilusión de volver. Pero él, Valerón, ya no estará.
2 Comentarios
Una gran perdida para los coruñeses , veremos donde acaba jugando el canario . Hay alguna idea de dónde puede hacerlo ?
Un saludo
Ha vuelto a jugar en Las Palmas, equipo del que es procedente, de las categorias inferiores, donde empezo en Las Palmas B en el año 94, y se fue en 1997. Uno de los mejores jugadores tecnicos, quizas le falto un punto de fisico para poder ser algo mas o el jugar en un grande, si hubieramos cambiado a Xavi por Valeron en el Barsa quien sabe hasta donde podia haber llegado, porque la calidad la tenia.