El pódium de la jornada en Europa

Para el Mainz 05 por volver al liderato de la Bundesliga. Su victoria en el BayArena sobre el Bayer Leverkusen por 0-1 unido al empate en Dortmund entre el Borussia y el Hoffenheim le colocan en primera posición con dos puntos de ventaja sobre los amarillos cuando ya se han disputado nueve jornadas de liga. Los hombres de Thomas Tuchel han logrado ocho victorias, perdiendo tan sólo ante el Hamburgo el duelo de la anterior jornada por 0-1. 

Esto ya no es casualidad. Al principio de temporada se pueden ganar dos o tres partidos de forma consecutiva y auparse al liderato, pero mantenerse en todo lo alto cuando se ha jugado una cuarta parte de la temporada no es casual, esconde un trabajo coincizudo y bien hecho que, por supuesto, también necesita su dosis de suerte para que todo salga a pedir de boca. Se podía pensar que la derrota en casa ante el Hamburgo la jornada pasada podría pasarles factura, pero se han repuesto inmediamente venciendo en Leverkusen.

Su fútbol presionante y rápido está tocado por una varita mágica en este inicio de temporada. Defienden sin fisuras ni contemplaciones, todos trabajan a una y en ataque sus delanteros resuelven con eficacia. ¿Cuánto durará esta idílica situación? Difícil saberlo. La razón dice que tarde o temprano se acabarán desinflando y bajarán puestos. Es muy complicado aguantar el ritmo que le imponen a los encuentros toda una temporada, al igual que la eficacia goleadora. Pero por otra parte el corazón me dicta que si aguantan en las posiciones de privilegio hasta el parón invernal pueden acabar dando la gran campanada. El momento crítico será en el momento de reanudar la competición. Si consiguen mantener la tensión y los buenos resultados durante dos o tres jornadas tras el parón la pueden armar gorda, sobre todo si los grandes favoritos como Bayern de Munich, Schalke 04, Bayer Leverkusen o Wolfsburgo siguen siendo tan irregulares.

MEDALLA DE BRONCE

Para Cristiano Ronaldo por los cuatro goles marcados en el 6-1 que le endosó el Real Madrid al Rácing de Santander. Si el crack de Madeira se conciencia de que en su equipo hay otros diez jugadores que también saben jugar la fútbol incrementará exponencialmente su rendimiento y sus números. Si por el contrario se empeña en jugar el sólo, empezando y acabando las jugadas hará algún que otro golazo pero acabará desquiciado él, sus compañeros y su afición. 

Su endiablada rapidez y contundencia en el disparo se ven favorecidas por el estilo impuesto por Mourinho de presión, robo y ataque vertical. Con Özil como lanzador tanto Cristiano como sus compañeros Higuaín y Di María pueden romper cualquier defensa, siempre y cuando jueguen entre ellos y no para si mismos. Aunque con Mourinho en el banquillo me parece que acabarán haciendo lo lógico: jugar entre ellos.

Hay que reconocer que también ayudó a su exhibición el planteamiento de Miguel Ángel Portugal en el Bernabeu. La defensa adelantada que plantó en el centro del campo fue un caramelo para el juego del Real Madrid y para hombres de la calidad técnica y rapidez que integran el once blanco. A los merengues es muy complicado jugarles pero hacerlo como el Rácing el sábado es un suicidio.