Sin duda lo más importante que nos depara la temporada invernal en cuanto a selecciones nacionales pasa por la competición por excelencia del continente africano. Esperaba con expectación el comienzo dela Copa de África más atípica de los últimos años, primero porque se disputa en 2 países diferentes y segundo porque faltan muchas -quizá demasiadas- selecciones que por potencial o tradición siempre son protagonistas en esta cita que sigue teniendo carácter bianual.
No es normal que se ausenten la actual campeona y 3 selecciones con presencia mundialista hace solo año y medio. Camerún, Nigeria, Egipto y Argelia no fueron capaces de superar en esta ocasión la siempre controvertida fase previa africana y han dejado paso a otras como Botswana, Níger o Sudán, mucho más exóticas y desconocidas futbolísticamente hablando. Y lo cierto es que por el momento no hemos visto gran cosa, una vez jugada la primera jornada en todos los grupos ninguna selección ha brillado y la sensación es que las dos indiscutibles favoritas, Ghana y Costa de Marfil, apenas se han desperezado para vencer en sus partidos con la ley del mínimo esfuerzo. Eso sí, con matices.
Porque lo de los Elefantes ya me parece un caso perdido. Me resulta absolutamente increíble ver a un equipo prácticamente igual al que analicé hace 2 años, con exactamente los mismos problemas de fluidez de los que aquí hablaba entonces. Gente individualmente excelente pero que no carbura porque no hay nadie capaz de imponer un ritmo de balón en mediocampo, 3 centrocampistas (Yaya Toure, Tiote y Gosso, aunque imagino que para el segundo partido volverá Zokora) que siguen sin encontrar la tecla que permita dar continuidad al juego. El nivel actual del resto de selecciones africanas tapa estas carencias porque lo cierto es que Costa de Marfil gana casi siempre a sus rivales continentales pero para mí les falta un mundo para ser competitivos contra cualquier selección medianamente potente.
De hecho creo que la propia Ghana debería vencerles en un hipotético enfrentamiento. Las Estrellas Negras son mejores colectivamente y tampoco les falta calidad individual. Claro que ver a Kwadwo Asamoah quedarse en el banquillo en el primer partido me rechina un poco, confío en que enseguida acceda a la titularidad porque lo considero indispensable para los ghaneses. Su mediocampo, aun sin Kevin Prince Boateng, es realmente excelente y a poco que Gyan se entone un poco creo que deberían ganar esta edición con cierta solvencia.
Y respecto a las otras favoritas que aparecen en las quinielas me da la impresión de que les faltan un par de hervores. Marruecos no tiene mala pinta pero creo que le falta tiempo para ser un proyecto sólido, Senegal me ha causado una impresión espantosa pese al buen nivel que tiene de mediocampo hacia arriba. Por cierto, las dos han comenzado perdiendo. Quizá Zambia y Guinea (Conakry) son las que han enseñado algún detalle para la esperanza que veremos si se confirma en las próximas jornadas.
Pero esto es todavía una primera toma de contacto, queda mucha competición por delante y espero que veamos más fútbol en los próximos días porque por lo visto en la primera jornada mejor haríamos en seguir los partidos del Mirandés en 2ª B…
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