Un verano más se repite la misma historia en las oficinas del Rayo Vallecano. Tras realizar una gran campaña en la Liga BBVA, el equipo sufre la marcha de sus mejores futbolistas, incapaz de retenerlos debido a los graves problemas económicos que asolan al club, y hasta dieciocho bajas se han contabilizado en este mercado veraniego. Toca por lo tanto, volver a hacer malabares con el presupuesto y realizar la enésima reconstrucción de plantilla.
Sin embargo, esta temporada hay motivos para el optimismo. Si bien otros años el plantel no se daba por cerrado hasta el último minuto del mercado, de cara a esta temporada 2014/2015 la directiva ha hecho los deberes a tiempo y la plantilla ha quedado cerrada (a falta de algún mínimo retoque) con más de veinte días de antelación con respecto al inicio de la competición. Además, Felipe Miñambres ha vuelto a obrar el milagro para incorporar jugadores de gran nivel como Aquino, Manucho, Leo Baptistao y Pozuelo, todos a coste cero. Esta fórmula le lleva funcionando mucho tiempo al Rayo. Para los futbolistas, el club de la capital también es un destino atractivo, ya que saben que es el lugar ideal para relanzar su carrera, como ya hicieron en el pasado Michu, Diego Costa o Javi Fuego.
Poder trabajar con el grupo al completo con suficiente antelación era una condición indispensable para Paco Jémez. El técnico canario es consciente de que sus métodos de trabajo y sistema de juego requieren un largo proceso de adaptación para los jugadores y la temporada pasada el equipo acusó la tardía planificación de la plantilla, lo que se tradujo en un comienzo de liga muy negativo. En este nuevo curso, el Rayo volverá a realizar una apuesta radical por la práctica de un juego combinativo y de clara vocación ofensiva. Para Paco, el estilo de juego es innegociable y la afición de Vallecas disfrutará de un fútbol atractivo y divertido, en el que el toque, la posesión y el buen trato del esférico serán los protagonistas. El otro aspecto sobre el que incidirá el cuerpo técnico será en intentar lograr una mayor solidez defensiva y reducir drásticamente el número de goles en contra.
Tácticamente, el conjunto madrileño cimentará su juego de posesión a partir de un 4-4-2, con una línea defensiva adelantada y asumiendo riesgos. En la sala de máquinas, dos mediocentros, uno creativo y otro de corte más defensivo, serán los encargados de generar juego para unos extremos con total libertad a la hora de encarar constantemente en ataque. En la punta, el delantero centro estará acompañado por un atacante con mucha movilidad y con facilidad para caer a banda o bajar a la media punta, ayudando en la construcción del juego. Jémez ha demostrado que no le tiembla el pulso y, si el resultado es adverso, no dudará en transformar el sistema en un ofensivo 4-2-4.
[rev_slider slider28]
Porteros
Tras una temporada muy irregular, el guardameta titular Rubén abandonó el club dirección Almería y, para esta nueva campaña, Cobeño, Toño y Cristian Álvarez serán los encargados de defender la meta franjorroja. Los tres son cancerberos experimentados y tratarán de dotar a la portería de una seguridad de la que ha carecido en las últimas temporadas. Cristian Álvarez parte como titular tras llegar más rodado al estar su equipo, San Lorenzo de Almagro, disputado la Copa Libertadores que a la postre ganó aunque él no disputara ningún minuto, pero la llegada de Toño en el último día del mercado de fichajes hará que no se relaje
Defensas
El regreso a la entidad de Amaya ha sido una de las noticias más positivas que ha deparado el mercado de fichajes. El canterano rayista proporcionará grandes dosis de solidez y veteranía a una defensa muy frágil en los últimos años. Como acompañante en el eje de la zaga disputaran el puesto Morcillo, uno de los mejores centrales de la pasada temporada en segunda división, y Zé Castro, un jugador muy del agrado del entrenador por su fantástica salida de balón. El joven Abdoulaye Ba intentará hacerse con minutos con su imponente presencia física como principal argumento.
En los laterales, el ex atlético Insúa parece destinado a ocupar el carril izquierdo, aunque Nacho no se lo pondrá fácil. En el costado opuesto, Tito tendrá que defender la titularidad frente a Quini.
Centrocampistas
Un año más, Trashorras volverá a ser el faro del Rayo Vallecano. Su excelente visión de juego y la facilidad con la que distribuye el balón le convierten en insustituible. La extraña marcha de Boateng abre de nuevo las puertas de la titularidad a Baena, que junto con Fatau, es el especialista defensivo en el centro del campo. Jozabed, una de las sensaciones de la pasada Liga Adelante con el Jaén, será otra alternativa a tener en cuenta en la media
Para las bandas, el equipo contará con un amplio abanico de jugadores, todos ellos con la velocidad, el descaro y el encare como principales virtudes. Aquino y Kakuta se postulan como titulares, con Licá, Embarba, Álex Moreno, Lass o Pozuelo como recambios de auténtico lujo.
Delanteros
Manucho será la referencia ofensiva en el área. El angoleño es el delantero perfecto para aprovechar las decenas de centros que sus compañeros enviarán al área en cada partido. Como hombres con mayor libertad de movimiento, la tripleta formada por Bueno, Baptistao y Pereira, todos ellos futbolistas rápidos, habilidosos y con gol, además de una gran polivalencia que les permite jugar en cualquier posición del frente de ataque. El Rayo ha formado una delantera de plenas garantías y no sería descabellado pensar en que, entre todos, alcanzasen la cifra de los 30 goles.
Con un presupuesto irrisorio para la categoría, Felipe Miñambres ha sido capaz de formar una de las mejores plantillas de la historia del club. El objetivo debe ser, como cada año, asegurar la permanencia. Sin embargo, si Paco Jémez consigue conjuntar desde la primera jornada a todos los nuevos fichajes, el Rayo puede ser el equipo revelación y optar a finalizar entre los diez primeros de la clasificación.
El fuerte carácter de Paco Jémez, unido con su innegociable apuesta por un fútbol atrevido y arriesgado, le han convertido en uno de los técnicos más respetados y exitosos del país
Roberto Trashorras - Su veteranía, clase y visión de juego le convierten en la extensión de Jémez en el campo
Alberto Bueno - Talento, calidad y gol al servicio del Rayo. La eterna promesa ya es realidad
Antonio Amaya - Contundencia y experencia para la zaga en su vuelta a casa
Momento Injusto
La campaña 2012/2013 acabó como la mejor temporada de su historia. Los 53 puntos conseguidos gracias a un juego admirado por todo el país, supusieron terminar en una magnífica octava posición que les permitiría disputar la siguiente edición de la Europa League. Por desgracia para el conjunto vallecano, una inexplicable sanción de la UEFA iba a privar en los despachos a los hombres de Jémez de disfrutar de lo que habían logrado en el campo. El viaje europeo terminó antes de empezar.
Pablo Ortega