Hablar de 1.Bundesliga es hablar del Bayern de Múnich, ya que el equipo de Pep Guardiola es el máximo y casi único favorito para alzarse con la ensaladera alemana. Todo lo que no sea que el Bayern repita título será una monumental sorpresa y un sonoro fracaso en el debe bávaro. Mas aún tras debilitar año a año a su máximo rival, el Borussia Dortmund, arrebatándole sus estrellas: el año pasado fue Götze, este año Lewandowski y seguramente el próximo será Marco Reus. El delantero polaco es sin duda la gran apuesta del Bayern para mantenerse en la cumbre, si bien ha perdido a un pieza vital como Toni Kroos, la ha cubierto perfectamente con el sorpresivo fichaje de Xabi Alonso. Además, ha reforzado su parte más vulnerable, el centro de la defensa, con la llegada del marroquí Mehdi Benatia.
Sólo el Borussia Dortmund puede hacer frente al poderoso bávaro, pero habrá que ver como se repone de la baja de su buque insignia. Tal era su importancia que para suplirle han llegado tres jugadores: Ciro Immobile, Adrián Ramos y Ji Dong-Won. La temporada pasada el equipo amarillo fue masacrado por las lesiones de prácticamente todos sus jugadores importantes (Gündogan no jugó en todo el año) y, si le respetan, este año puede dar guerra. De la chistera de Klopp y de la enfermería borusser saldrán las opciones de una Bundesliga igualada.
Con la lucha por el título acotada a estos dos equipos, se abre un abanico de candidatos para ocupar las otras dos plazas de Champions League. El Schalke 04, que contará todo el año con Huntelaar, y el Leverkusen, que ha fichado a Drmic y Çalhanoglu, parten como favoritos para repetir clasificación de cara a la máxima competición europea, pero el Wolfsburgo ya lo rozó el año pasado y ha mantenido el bloque, mientras que el Gladbach se ha reforzado bien para intentar el asalto a estas plazas tan privilegiadas. Los dos que se queden fuera deberían ocupar las plazas de Europa League y sólo si uno de los seis primeros clasificados se alza con la DFB Pokal se abriría una plaza extra para equipos como Mainz, FC Augsburg, Hertha Berlín o Hoffenheim, que deben transitar por la Liga sin agobios.
En la zona media-baja la atención se centra en el papel que jugarán tres históricos como el Werder Bremen, Stuttgart y Hamburgo, que ya la temporada pasada coquetearon con el descenso, sobre todo el Hamburgo, único equipo que jamás ha descendido, y que jugó una dramática promoción de descenso. Ha perdido a Çalhanoglu, pero ha podido retener a Pierre-Michel Lasogga y contará con Mirko Slomka en el banquillo desde el inicio. Si jugadores como Ilicevic, Jiracek o Van der Vaart dan lo que se espera de ellos, no deberían pasar apuros.
Eintracht de Frankfurt, SC Freiburg y los recién ascendidos Colonia y Paderborn son los máximos candidatos al descenso y promoción. El Paderborn es el candidato número uno al descenso, mientras que el Colonia se ha reforzado bastante bien para intentar no ser un equipo ascensor como en la última década. Eintracht y Friburgo ya estuvieron cerca del abismo el año pasado y han perdido a alguno de sus mejores jugadores, por lo que lucharán hasta el final por salvarse de la quema.
La competición alemana aumenta aún más su atractivo esta temporada con el aliciente de ver al grueso de los flamantes campeones del Mundo en acción por los modernos y coquetos estadios de Alemania.
Juanvi Safont